En sus palabras de bienvenida, el Rector General, fray Juan Ubaldo LÓPEZ SALAMANCA, O. P., expresó que “el mérito se otorga no porque hicieron lo que les tocó, sino porque viven la vida respondiendo a lo justo, a lo necesario, es decir, a hacer lo que los promueve como personas, como ciudadanos, como futuros profesionales (…) y al procurar lo justo este mérito siempre debe estar al servicio de los demás, del bien común”. Los estudiantes asistieron en compañía de sus orgullosos padres de familia y del grupo de directivos académicos de la Institución. Todo gracias al trabajo en equipo de las vicerrectorías Académica General, Financiera Administrativa General y del Departamento de Promoción y Bienestar Universitario, quienes realizaron este reconocimiento público que también representa un auxilio económico obtenido bajo las condiciones que se establecen en el Reglamento de Auxilios y Descuentos Educativos.

Para el cierre del evento los asistentes presenciaron la puesta en escena del grupo de danza folclórica de la USTA, acompañados de la percusión del Pacífico colombiano. Esta noche la Universidad acompañó a las personas que son emblema de nuestra misión; retribuyendo a sus familias con el desempeño honorífico en la carrera que decidieron transitar. Inclusive yendo más allá, al enriquecimiento de su dimensión espiritual con el arte, y física con el deporte. Celebramos en conjunto estos cientos de logros particulares que nos permiten reiterar el cumplimiento de los objetivos de la Universidad: la formación integral de nuestros estudiantes. La base de nuestra misión es aportar al avance de la sociedad, proporcionando educación de calidad reflejada en profesionales de alto nivel.