El Dr. Puca, expuso su experiencia en la UNPA, visibilizando el escenario que permitió la creación de cuatro categorías para el reconocimiento del trabajo de las actividades propias de las funciones y el proceso de categorización para el docente extensionista. Algunos de los elementos señalados fueron: el tiempo de trayectoria mínimo (3 años) que los docentes deben tener en el desarrollo de la actividad, en las que se incluyen las siguientes características: 1) comunicación pública de la ciencia y la tecnología, 2) extensión rural o industrial, 3) prestación de servicios sociales o comunitarios, 4) producción y divulgación artística o cultural. Este proceso de especialización en el campo de acción permitió la resignificación de la función y ha permitido a nivel de la República de Argentina, contar con un Banco Nacional de Evaluadores de la Extensión Universitaria, el cual hace parte de la Red SUNNIT y cuya categorización es válida por 4 años.
En el taller participaron directivos de las unidades académicas, decanos de facultad, docentes de Proyección Social e Investigación, quienes identificaron algunos ejemplos y rutas que clarifican los criterios para que la USTA continúe validando y reconociendo la labor del docente adscrito a Proyección Social en el escalafón docente, además de la importancia de las acciones de extensión y la continua visibilización del compromiso de la Universidad, partiendo de la rigurosidad académica para el abordaje responsable de las acciones de extensión
El reto para los docentes y las instituciones de educación superior es la sistematización de las experiencias, documentación y visibilización de las acciones que articulan las funciones sustantivas.