Cuando las empresas ingresan en una comunidad, asumen una responsabilidad tanto con las personas como con su entorno. Para cumplir con las metas trazadas, es necesario establecer un horizonte que permita dimensionar los objetivos y crear planes y estrategias para alcanzarlos. Un ejemplo claro es el de los Centros de Proyección Social de la Universidad Santo Tomás, que le permitieron a la institución ser reconocida como una de las 22 Empresas Inspiradoras de Colombia.
Continúa leyendo la noticia publicada por Kienyke el 07 de septiembre de 2020