Por: Teddy Angarita Sierra, docente de la Maestría en Gestión de Cuencas Hidrográficas.
No obstante, a pesar de nuestra estrecha comunión con el agua, nuestra conciencia acuática es muy corta. Hasta hace menos de 30 años los colombianos solo reconocíamos a los humedales como píchales*; a los ríos como vertederos de basura; y a los páramos como pastizales para vacas y cultivos de papa. Con la llegada de las extremas sequías, se incrementa la escasez de agua potable y la erosión de nuestro campo; a la fuerza hemos tenido que tomar conciencia que de agua somos y en agua nos convertiremos.
La Maestría en Gestión de Cuencas Hidrográficas de la Vicerrectoría General de Universidad Abierta y a Distancia (VUAD), busca formar profesionales capaces de enfrentar los retos de la gestión, manejo y uso sostenible de la riqueza hídrica de nuestro país. Y, a través de iniciativas como la creación del Observatorio Ambiental para la cuenca del río Bogotá (OAB) y la Red de Formación en Investigación Avanzadas: Territorio H2O, los estudiantes desarrollan sus habilidades analíticas e investigativas, y adquieren las herramientas necesarias para encarar de forma innovadora las problemáticas ambientales del país.
* Hueco lleno de agua.